Jesús adorado en Viernes Santo

Miles de feligreses colman los templos de todas las ciudades de Nicaragua para agradecer el sacrificio que hizo por sus semejantes el Hijo de Dios, cuya vida muestran las alfombras creadas en León, las que  junto a su imagen en las barcazas de las isletas de Granada, saludan el Viernes Santo.

Esta es una de las principales celebraciones del Cristianismo, es el día de la Semana Santa en que se recuerda la Crucifixión y Muerte de Jesús de Nazaret en Jerusalén.

El Viernes Santo la Iglesia Católica impone a sus fieles una penitencia; ellos deben guardar ayuno y no comer carne roja, y tampoco, según la antigua tradición, se celebra misa debido al luto, sólo se adora la Cruz.

Un ambiente sombrío envuelve la liturgia del Viernes Santo, el templo debe estar apagado o en penumbras, no hay velas, ni manteles, ni adornos, ni en el Altar Mayor ni a los lados, sólo se coloca un pedestal al costado, con la Santa Cruz que se venera.

Como la Iglesia está de luto, la imagen de la Virgen luce de negro, mientras el Crucifijo y las demás imágenes los cubre un paño morado, tampoco hay coro polifónico, en tanto las campanas y el órgano enmudecen.

El Viernes Santo se conmemora la Crucifixión de Jesús, el Sábado Santo es la Vigilia Pascual y el Domingo la Resurrección. En este período llamado Triduo Pascual los fieles meditan, mientras esperan la Resurrección.

Los fieles conmemoran este día con el Vía Crucis o Camino de la Cruz, mediante las 14 estaciones que rememoran los pasos de Jesús hasta su muerte en el Monte Calvario.

En León, barrio indígena de Sutiaba hace alrededor de un siglo una familia inició la tradición de hacer alfombras decorativas, primero de tierra y después de aserrín, en la calle por donde tradicionalmente pasaba el Santo Entierro el Viernes Santo.

Las alfombras atrajeron la atención de los vecinos, quienes los imitaron y comenzaron a hacerlas con escenas de la Pasión y Muerte del Señor por lo que se conocen como Alfombras Pasionarias, y al lugar donde nacieron le llaman calle de las alfombras.

Otra particularidad ocurre en el Departamento de Granada, donde el Viernes Santo los vecinos de la comunidad de Chocote, formada por varias isletas, realizan una procesión llamada Vía Crucis de las Isletas, durante la cual los pobladores en lugar de caminar, navegan en sus barcazas en las que llevan consigo la imagen de Jesús.

Estas iniciativas, que enriquecen la tradición religiosa y la cultura nicaragüense, son promovidas por el Instituto Nicaragüense de Turismo, que apoya 292 actividades diversas para el disfrute de la población durante la Semana Santa.

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