El penalista José Francisco Ayala Picado informó que acusará al tico Eduardo Ramírez Zamora, de 43 años, por el delito de homicidio por xenofobia, el cual cometió al asesinar de 14 balazos al nicaragüense Otoniel Orozco Mendoza, de 53 años, en un condominio de la capital costarricense.
El abogado de la familia doliente dijo desde Costa Tica que está realizando todos los trámites legales para que se haga justicia en este crimen por xenofobia, el cual quedó claro por la premeditación, alevosía y ventaja, con que fue cometido en el condominio Río Palma Guachipelín, en Escazú.
“Otoniel deja a su familia y empleados desvalidos…hay una ventaja totalmente planeada, creemos que incluso hay otros elementos y sujetos activos dentro del proceso que tendremos que traer para efectos legales y que sean quienes respondan ante la justicia”, señaló el acusador.
“Nosotros estamos apegados a la resolución judicial, esperamos que estos tres meses de prisión preventiva que le dictaron al tico, nos podamos ir a juicio lo antes posible y hacer valer con justicia los agravios que ha sufrido la familia del nicaragüense Otoniel Orozco”, agregó Francisco Ayala.
Según las autoridades ticas, Otoniel Orozco y su asesino tenían problemas desde el 2020, por la construcción de unos cuartos en la casa del nica y terminaron por una llave de pase de agua que estaba en medio de las casas de ambos.
Sin embargo, un familiar de Otoniel Orozco afirmó que el tico no lo mató por la llave de pase, sino porque lo tenía planificado desde hace mucho. “Lo mató porque era nicaragüense, esa es la verdad”.
“Ese señor lo acosó durante 4 años, haciendo de su vida un infierno. Todas las noches golpeaba las paredes, ya había intentado matar a mi hermana embrazada”, dijo el allegado de la víctima.
“El tipo lo mató por odio a que viviera un nicaragüense en el condominio, porque según sus ofensas, los nicaragüenses vivimos en pobreza. Mi familia es de nacionalidad nicaragüense y me siento muy orgullosa de eso”, dijo por su parte la viuda.
El nicaragüense Otoniel Orozco Mendoza fue asesinado el pasado lunes, el martes repatriado a Nicaragua, y sepultado la tarde del miércoles en un camposanto de la comunidad Trujillo, de Ciudad Darío, Matagalpa, de donde era originario.