«Jugué el partido de mi vida», menciono Wawrinka tras derrotar a Novak Djokovic por 4-6, 6-4, 6-3 y 6-4 en la final de Roland Garros, quien ganó su Segundo título de Grand Slam, el primero había sido Australia 2014.
Control, puntos largos, movidas estratégicas. Así fueron los primeros puntos de la final, con un Djokovic parado un poco más atrás en la cancha, producto de la potencia de Wawrinka. Acorde al marcador, el suizo fue de menor a mayor en el segundo set. Tras pasar un momento de apuro en el primer juego, con su servicio, pasó a sentirse más cómodo en cancha.
Djokovic, que había llegado a la cita como invicto en los últimos 28 partidos, 16 de ellos en tierra termino perdiendo la racha hoy.
“Wawrinka lucio unos pantalones playeros más propios de las vacaciones que de un partido de tenis, aprovechó la ansiedad de un Djokovic que jugaba por ganar Roland Garros pero también para pasar a la historia”, destacaron algunos medios internacionales. Se había preparado bien para el titulo y había dejado por el camino a Rafael Nadal, nueve veces campeón de Roland Garros, y a Andy Murray, el número 2 de la Race 2015.