Un autobús de transporte urbano colectivo fue el blanco de un ataque perpetrado por sicarios a la altura del penal de Piedras Gordas, en Ancón, Perú.
Pese a resultar herido por una bala en el rostro, el chofer del vehículo continuó la marcha hasta poner a salvo a los pasajeros que transportaba.
Este fue el segundo atentado contra esa empresa de transporte Virgen de la Puerta S.A. (Vipusa) en menos de 48 horas.
Testigos revelaron que vieron a un hombre descender de una motocicleta, pararse al borde de la pista, pero que no hacía señas para subir al automotor. Luego, apenas pasaron, escucharon disparos y los impactos sobre el lateral del transporte.
Uno de los proyectiles hirió en la mandíbula al conductor Amargo Salinas Marcial quien, pese a sangrar profusamente, siguió conduciendo para permitir que 22 usuarios queden a salvo.