Serafim Todorovo le ganó en las semifinales de Juegos Olímpicos de Atlanta ’96. El norteamericano fue medalla de bronce y ahora acumula 47 peleas invicto. Una vida sin gloria, desocupado y tentado por un red de narcotráfico marcan la historia del búlgaro
El 2 de agosto de 1996, Floyd Mayweather Jr. fue derrotado por última vez. Por puntos (10-9), cayó ante el búlgaro Serafim Todorov en las semifinales de los Juegos Olímpicos de Atlanta ’96 y debió conformarse con el bronce, junto con el mendocino Pablo Chacón.
«Felicito a Floyd porque todo lo que ha logrado en su vida, lo ha logrado a través del esfuerzo», dijo el ex boxeador, que le propino la única derrota de su carrera. «No lo envidio porque hizo lo correcto, trabajó duro por todo lo que ha. Se merece todo lo que tiene», agregó.
La decisión ante Mayweather fue controvertida. En ese certamen se contaban los golpes que cada púgil le daba a su rival de acuerdo a una chicharra que tres de los cincos jueces debían tocar. Incluso, el árbitro Hamadi Hafez Shouman se equivocó en el ganador al dar el fallo.
«Él tenía menos técnica que yo en ese entonces, tenía 19 años y yo 27. Peleé con astucia y Maywethaer cayó en la trampa», dijo en declaraciones a CN23. «Mi vida ahora es mi familia, en realidad ya no hablo con la gente», añadió.
Tras vencer al norteamericano, rechazó ofertas de promotores para hacerse profesional y prefirió seguir con su carrera amateur. Floyd aceptó esas mismas ofertas y luego mantuvo un invicto de 47 victorias siendo campeón en cinco categorías.
A pesar de aquella victoria, Todorov cayó en la final ante el tailandés Somluck Kamsing (8 a 5) y debió conformarse con la presea de plata. «Después de esa pelea, todo en mi vida empezó a ir cuesta abajo», reconoció el búlgaro.
«Luego de que perdí tuve que quedarme en Atlanta un par de días más para esperar nuestro avión. Ahogué mis penas en alcohol cuando regresé a Bulgaria, quería dejar el boxeo», contó.
Con tres títulos mundiales amateur en su haber, el boxeador prefirió continuar su carrera con un contrato de la Federación Bulgara que nunca se cumpló. Esto provocó que tratara de cambiar de nacionalidad y mudarse a Turquía, cuya federación de boxeo le ofrecía un salario mayor por representar a su país en los campeonatos mundiales de 1997.
Sin embargo, un desacuerdo entre ambas instituciones hizo caer sus planes. Así Todorov renunció al boxeo amateur y tuvo un puñado de peleas como profesional, pero en 2003 se retiró sin gloria.