Un trabajador de Taiwán, decidió estafar a seguro para cobrar una indemnización millonaria. ¿Cómo? Cortándose una de sus manos.

Las investigaciones que llevaron a cabo los peritos judiciales de China y Taiwán determinaron que todo había sido una farsa. ¿De dónde salió tanto interés? El seguro, valorado en algo más de un millón de euros, le habría cambiado la vida a Hu Chi- yang.
Los agentes policiales hallaron un cuchillo y varios anestésicos en un lugar cercano a su vivienda. El propio Yang denunció que en un viaje de negocios un ladrón le cortó una de sus manos.
Eso sí, la jugada le ha salido bastante cara a este ciudadano. ¿Por qué? El Tribunal Superior ha decidido condenarlo a 10 meses de prisión por fraude.
Ni los recursos de su defensa ni el suplicatorio, que ha realizado en los últimos meses, le ha salvado, ya que la justicia china ha hablado y ha confirmado su pena.