El volcán Kawah Ijen de 2,386 metros de altura está ubicado en la meseta de Ijen, en Indonesia, y se ha convertido en un popular destino turístico, y un imán para los fotógrafos de todo el mundo.
Esto debido a las espectaculares fotografías que se logran en este lago de aguas ácidas y sus llamas azules o “blue fire”, que solamente pueden apreciarse por la noche.
El color azul se deba a que cerca del volcán hay un lago de aguas ácidas. Incluso, dicen que es el más ácido del mundo.
El color de las llamas se debe a las reacciones químicas creadas por la expulsión de ácido sulfúrico.