Un trabajador sexual terminó baleado luego de que acudió a un domicilio de Nuevo León, en Monterrey, México, donde había concertado un encuentro previamente con un hombre, quien al no quedar satisfecho sacó su arma y le disparó.

De acuerdo con la versión de la víctima, Juan José B., un hombre lo contrató a domicilio para tener un encuentro sexual programado, sin embargo el cliente no pudo consumar la relación tras lo cual el trabajador le pidió el pago por haber acudido.
En ese momento el sujeto que lo contrató discutió con él y buscaba no pagarle, debido a que no se había consumado el acto; sin embargo ambos terminaron discutiendo y el trabajador fue baleado en medio de la pelea.
Debido a que se encontraba vestido con un disfraz de albañil, algunas personas indicaban que la víctima era un trabajador de la construcción, pero no era así.
Fue el propio cliente el que le pidió que llegara con un vestido con restos de mezcla para que lo hiciera sentir como que estaba sosteniendo relaciones con un sujeto rudo.