Reducida a cenizas con todo lo que había en su interior, quedó lo que fue la vivienda del ciudadano Carlos Andrés Huete Santamaría, de 31 años, en la ciudad de Chinandega, la noche de ayer miércoles.
El hecho ocurrió del Puente Rojo media cuadra abajo, en el barrio Cachorros de Sandino, en donde una candela dejada encendida sobre un ropero plástico causó las llamas que se alzaron rápidamente arrasando todo lo que había a su paso.
El fuego destruyó dos camas, un ropero, un tanque de gas, dos mesas de madera, una pulidora, un taladro, dos abanicos de pedestal, una laptop, una cocina de cuatro quemadores, una lavadora, seis sillas plásticas y toda la ropa.
Al lugar se presentaron agentes de la Policía Nacional a resguardar el orden y miembros de los Bomberos Unidos, quienes controlaron y evitaron que el fuego alcanzara otras viviendas aledañas.
Afortunadamente el siniestro no causó afectaciones a la vida humana.
