En cuanto la sangrada y milagrosa imagen de Santiago de los Caballeros fue bajada, los feligreses la cargaron en sus hombros y recorrieron las principales calles, junto al padre Miguel Angulo. Muchos de los fieles aprovecharon para pagar sus promesas o favores recibidos.
El pueblo de la ciudad de Boaco y de los demás municipios dicen presente en la celebración de las Fiestas Patronales y desde ya, se preparan para el Desfile Hípico a realizarse el domingo 17 de julio.