La marea alta y fuerte oleaje que desde tempranas experimenta las aguas del balneario de 
Pochomil ocasionó que varias enramadas quedaran inundadas y que las familias de la zona se pusieran en alerta.
Doña Isabel Lanzas Peralta, se quedó sin la enramada ubicada frente a la playa, luego que las fuertes olas la derribaran. “Desde las 5 de la mañana el mar ha estado picado y con esas grandes olas”, finalizó doña Isabel.
Los pescadores de la zona han tenido la prudencia de no salir a faenar para evitar cualquier tragedia.
Este fenómeno también se registró hoy en los balnearios de Poneloya y Las Peñitas, ubicados en el departamento de León, donde varios negocios quedaron inundados, tal es el caso del restaurante Alex, donde todos los trabajadores se resguardaron.
Los propietarios de ranchos y negocios ubicados en los balnearios de Jiquilillo, Estero Padre Ramos, en el departamento de Chinandega han sido afectados por el fuerte oleaje que ha provocado el fenómeno de mar de fondo.
El pronóstico marítimo emitido por el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER), las olas pueden alcanzar una altura de entre 1 y 1.5 metros. Según los expertos, el fenómeno de mar de fondo finalizará en los próximos días y el mar volverá a la normalidad.