Por motivos desconocidos, Miguel Ángel Blandón Bustamante, de 20 años, acabó con su vida al ingerir par de pastillas de gastoxín en su casa ubicada en la comarca Pared del Valle en el municipio de San Rafael del Norte, Chinandega.
Miguel Ángel, fue encontrado por su mamá Flor Blandón, tirado en su cuarto manando abundante espuma de la boca, enseguida pidió auxilio para trasladarlo al Centro de Salud de la zona y posterior al Hospital España, donde murió.
Las autoridades policiales de Chinandega llegaron al lugar para investigar el caso y descartar mano criminal. El infortunado joven padecía epilepsia.