“Nunca he sido un hombre violento con las mujeres, todo eso es mentira”, aseguró en entrevista con la cadena estadounidense de televisión ABC, tras admitir que la única vez que agredió físicamente a Whitney fue en un momento en que “estaba literalmente luchando por mantenerme sobrio”.
Lo que empezó con amor se fue deteriorando y la relación que comenzó en 1992 se fracturó por completo en 2007, y además aprovechó para desmentir que él inició a su famosa esposa en las drogas y que la primera vez que la vió consumir cocaína fue paradójicamente el día de su boda.
“Los últimos años que pasamos juntos fueron terribles. O estábamos los dos tratando de salir juntos del atolladero, o uno de nosotros se encontraba mal y tenía que dedicarse por completo a recuperarse. Nunca hubo un momento de normalidad”, relató.
Al infierno de las drogas que consumió su matrimonio se sumó la devastadora noticia de la muerte de la única hija natural de ambos, la joven Bobbi Kristina, quien falleció en 2015 tras ser víctima de sus propias adicciones.
“Whitney solía encerrarse en una habitación durante horas para consumir todo tipo de sustancias mientras que Bobbi, siendo un bebé, estaba en el cuarto de al lado con la niñera dándole de comer.
“El caso es que yo siempre traté de que nunca nos viera haciendo esas cosas, pero la verdad es que no fuimos buenos padres, deberíamos haber sido mejores padres con ella”, advirtió.