La tarde de este jueves 6 de junio el Comandante Daniel Ortega y la compañera Rosario Murillo presidieron el homenaje póstumo que se realizó en el Palacio de la Cultura al héroe del amor, la paz y las victorias, compañero Bismarck Martínez.
Daniel: Bismarck Martínez en el corazón del pueblo
El presidente Daniel Ortega durante el homenaje póstumo dijo que “pensaron que después de torturarlo, de la forma más brutal y cobarde, y de poner en las redes el acto brutal de la tortura, pensaron que había que desaparecerlo y no podían entender que desde el momento mismo de aquellas imágenes horrendas de la tortura, ya Bismarck estaba para siempre y por siempre en el corazón de todos los nicaragüenses, en el corazón del pueblo nicaragüense”.
En el corazón del pueblo honesto, del pueblo honrado. En el corazón del pueblo que verdaderamente le tiene amor a Dios, amor a Cristo.
Señaló que todos los días su familia preguntaba, por encontrar sus restos mortales. “Pero él, ya transitaba a otro plano de vida, pero, la familia convencida de que había sido asesinado de la forma más brutal y más cobarde, quería encontrar los restos mortales para confirmar, porque (no hay) nada más terrible, angustiante y angustioso, para un ser humano, que la desaparición de un familiar”, dijo el Presidente Daniel Ortega.
“Es cierto, está la muerte, pero ante el convencimiento de la muerte, ante la vista del familiar que murió, pues está la satisfacción del acompañamiento”, añadió.
Resaltó que lo hicieron sufrir, pero torturaron también a la familia, con la desaparición. “No les bastaba haber hecho sufrir, torturar, a Bismarck, con toda la saña que lo hicieron, sino que también hicieron sufrir a la familia”, resaltó.
“¿Cuántos días, cuánto tiempo? Y ya se había convertido en un himno en ese momento, la letra de ese canto, que dice: ‘¿La tumba del guerrillero, dónde, dónde está?’”, reflexionó.
“Igual nos preguntábamos, empezando por su familia, dónde, dónde está Bismarck, dónde lo enterraron después de torturarlo y asesinarlo”, añadió.
Eran horrendos los actos terroristas
“Eran horrendos y llenos de todas las maldades que nos podemos imaginar. Típico de lo que son la prácticas de los fascistas que cremaban y cremaban en los hornos, después de hacerlos pasar hambre a millones de seres humanos, de judíos, perseguidos, encarcelados, llevados a los campos de concentración y luego a los hornos, a quemarlos, millones de seres humanos”, dijo el presidente Comandante Daniel.
“Pareciera que los mismos fascistas que cometieron aquellos crímenes habían hecho presencia aquí en nuestra patria, para sembrar el terror”, dijo.
No se pronuncian los que dicen llamarse «Demócratas»
El comandante Daniel Ortega destacó que los actos violentos cometidos en el 2018 y en específico el asesinato del compañero Bismarck Martínez no ha sido condenado por los que se autoproclaman «demócratas».
“Crímenes que no han sido condenados por los que se dicen demócratas, no hemos conocido por lo menos ningún comunicado de grupos políticos, agrupaciones gremiales, que hayan condenado este crimen, que hayan condenado la desaparición, que hayan condenado la brutalidad, el ensañamiento, que se hayan solidarizado como seres humanos con la familia de Bismarck”, enfatizó el presidente.
“No hemos escuchado tampoco ningún comunicado de la Conferencia Episcopal, no lo hemos escuchado. Ningún comunicado de la Conferencia Episcopal condenando estos crímenes”, añadió.
“Condenando este crimen en particular, que lo que tiene de más brutal, es el hecho de la desaparición. No hemos escuchado organismos de derechos humanos también, preocupándose por buscar dónde estaría, dónde estaba la tumba de Bismarck”, prosiguió.
“Disfrutan del dolor, disfrutan del sufrimiento y finalmente, después de muchos esfuerzos de la familia, de Miguel Enrique, yerno, en la búsqueda, la Policía buscando, el pueblo buscando y cuando ya parecía que no lo íbamos a encontrar, los huesos, los restos de Bismarck”, aparecieron.
El presidente Daniel Ortega resaltó que este acto recuerda al imperio y a Somoza, cuando asesinaron a Sandino, no les bastó asesinarlo, sino que había que desaparecerlo.
«Pensando que de esa manera el pueblo se iba a olvidar de Sandino, se ha dicho que lo enterraron en un punto, que después lo llevaron a otro punto, que después lo tiraron en el lago para que el pueblo jamás lo encontrara.”, resaltó.
“Pero aquí los fascistas, los terroristas, no han podido entender lo que significa la fuerza, la potencia de la dignidad en la defensa de la patria y Sandino con ese tránsito a otro plano de vida, un tránsito a la inmortalidad, porque entonces Sandino quedó para siempre corriendo por las venas, por la sangre, palpitando en el corazón de la inmensa mayoría de nicaragüenses que aman a Nicaragua y que no tienen actitudes vendepatrias”, dijo.
Destacó que estaban presentes en el Salón del Homenaje la compañera de Bismarck Martínez, Mirlen Cecilia Méndez Ventura, también la compañera Rosibel Pineda, los hijos Mirlen Martínez, Heidi Martínez, Bismarck Antonio Martínez, Oscar Danilo Martínez, así como los siete nietos que dejó Bismarck Martínez, entre ellos José Daniel.
El presidente Daniel Ortega destacó que también al palacio asistió el pueblo y la juventud, acompañándolo luego del homenaje que le rindieron en la Alcaldía de Managua, porque era un trabajador, laboraba en la Alcaldía, le entregaron la Orden del Bicentenario de Managua.
“Era un trabajador que buscó cómo visitar a la familia y ahí fue que lo capturaron, lo torturaron y lo asesinaron”, dijo el comandante Daniel.
“Hoy van a reposar sus restos al camposanto, pero el mensaje que nos deja, este hecho, esta tragedia terrible, es que hoy más que nunca tenemos que seguir luchando con firmeza, sí, con firmeza, por la paz”, recalcó.
Defender la paz
El presidente Daniel Ortega señaló que “tenemos que defender la paz, la estabilidad, la seguridad, aún a costa de nuestras propias vidas. Si por la paz, la estabilidad, la seguridad, tenemos que entregar nuestra vida, entregamos nuestra vida”.
“Esta es una batalla que hoy estamos librando, con mucho dolor, con mucho coraje, también ahí con mucho coraje, con mucho dolor y haciendo a un lado, combatiendo, las tendencias naturales que existen en todo ser humano, que es la tendencia a la venganza”, dijo.
“Sería una espiral sin fin. Ya hemos vivido momentos de guerras en nuestra patria, múltiples tiempos de guerra, es importante ahora asegurar la paz, con la fuerza, con la potencia del espíritu, de la voluntad de lucha por la paz de los trabajadores, de los campesinos, de las mujeres, de los jóvenes, de todo el pueblo nicaragüense dispuesto a defender la paz”, advirtió.
“Ese es el gran desafío que tenemos, queridos hermanos, el gran desafío: Defender la paz, en un mundo en el que cada día hay que estar luchando por la paz, en todas partes del mundo, en todas partes del planeta, de situaciones de violencia, de guerras, de terrorismo, crímenes, odios, por eso es que yo no me canso de recordar y repetir aquellos gritos de nuestro Rubén Darío, cuando decía: Yo quiero paz”.
“Ese era su grito, un canto de la paz, hablando de los errores que se vivían en esos momentos en el planeta, de las guerras que se vivían entonces en el planeta y los nicaragüenses hemos jurado ante Dios, hemos jurado ante nuestros héroes y mártires, y lo juramos ante Bismarck que nuestra respuesta no será jamás la venganza, no será el ojo por ojo, nuestra respuesta es y será defender con la mayor firmeza, sin vacilación alguna, dispuestos a entregar la vida misma para defender la paz que es lo que desea, que es lo que quiere el pueblo de Nicaragua”, concluyó.