En una expresión de alegría y devoción, Nicaragua celebra este jueves la tradicional Gritería en honor a la Inmaculada Concepción de María.
La Vicepresidenta de Nicaragua, Compañera Rosario Murillo, destacó la festividad como un momento de paz, unión familiar y fe, reflejando los valores y la cultura de concordia de nuestro país.
En su comunicación con las familias nicaragüenses, a través de La Nueva Radio YA, la Vicepresidenta expresó su gratitud al «Dios de todas las victorias» por permitir a la nación vivir otra Gritería en un ambiente de armonía y espiritualidad.
«Muchísimas gracias al Dios de todas las victorias porque vivimos otra Gritería en paz, en familia, en fe, en valores, en cultura de concordia, de encuentro, de comunidad», expresó la Vicepresidenta Murillo.
La compañera Rosario resaltó además la belleza de esta festividad nicaragüense, una celebración que honra a la madre de Dios y de todos. El 7 de diciembre se convierte en un día de agradecimiento y esperanza para los nicaragüenses, lleno de alegría y devoción.
La Vicepresidenta subrayó la influencia positiva de la madre de Dios en la vida de las personas, proporcionando fuerza, fortaleza y esperanza, y extendiendo su manto celestial sobre toda Nicaragua.
«Que hermosa fiesta la que tenemos las y los nicaragüenses y como la hemos promovido, destacado, alzado como madre de Dios y como madre de todos que merece lo mejor. Nos sentimos cada 7 de diciembre en primer lugar agradecidos porque llegamos a la Gritería no solo llenos de alegría, no solo agradecidos a la madre porque nos causa tanta alegría celebrarla, sino con tanta esperanza», enfatizó la Vicepresidenta.
Este día de celebración refleja la fe profunda y la unidad de Nicaragua, un país mil veces bendecido, prosperado y victorioso.
La Gritería simboliza no solo una tradición religiosa, sino también un momento de unión y esperanza para todo el pueblo nicaragüense.