Su Eminencia Reverendísima Cardenal Miguel Obando y Bravo envió un mensaje de Semana Santa a todas las familias nicaragüenses y aprovechó para desearles que pasen unas vacaciones en Paz y Unidad Familiar.
A continuación el mensaje del Cardenal Miguel Obando y Bravo:
Para los cristianos, la Semana Santa es la contemplación del Amor de Dios, que permite el sacrificio de su hijo, el dolor de ver a Jesús crucificado, la esperanza de ver a Cristo que vuelve a la vida y el júbilo de su resurrección.
Es un tiempo de Gracia, de renovación, de transformación. Para experimentar plenamente el gozo y la alegría de la resurrección debemos primero vivir con Cristo su pasión y muerte.
La muerte de Cristo nos invita a morir también; no físicamente, sino a echar o alejar de nuestra alma el egoísmo, el rencor, la soberbia, la avaricia, el orgullo y todo aquello que nos aleje de Dios para estar debidamente dispuestos a la venida de la Gracia.
La resurrección del Señor nos abre las puertas a la vida eterna, su triunfo sobre la muerte es la victoria definitiva sobre el pecado.
Recorramos este camino de la mano de María, madre de Cristo y Madre Nuestra, quien acompañó a su Hijo durante su pasión y muerte. Que nos sostenga la gracia que en estos días dejen una huella profunda en nuestras vidas y en nuestros corazones para que redunde la paz y la armonía en las familias nicaragüenses.
La vida debemos cuidarla, defenderla y promoverla
Por otra parte, Su Eminencia Reverendísima, llamó a las familias nicaragüenses para que en esta temporada de Semana Santa y vacaciones de verano, cuiden la vida, la defiendan y la promuevan.
“Cuando nos acercamos a la Semana Santa recordamos a los buenos hermanos que van en sus vehículos, que tengan mucho cuidado en estos días porque la vida debemos cuidarla, defenderla, promoverla”, expresó.
“Se necesita mucha responsabilidad para que realmente conduzcamos con esa seriedad que debe tener todo conductor, pensando en su propia vida, pensando en la vida de sus semejantes”, agregó Su Eminencia en un mensaje dirigido a las familias nicaragüenses.