El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, recibió esta noche al compañero Hugo Chávez y a otros mandatarios miembros de ALBA, que sesionarán en Managua, para tomar acciones tras el golpe de estado en Honduras.
El presidente Chávez dijo que en la reunión analizarán la situación de Honduras y adoptarán las medidas necesarias para respaldar la democracia del pueblo hondureño.
Chávez saludó al pueblo de Nicaragua y dijo al compañero Daniel que hace acto de presencia en respuesta a su convocatoria de urgencia, para ratificar y tomar decisiones a favor de Honduras.
El compañero presidente Daniel Ortega dijo que se siente honrado de recibir al presidente de la república bolivariana de Venezuela, Hugo Rafael Chávez, y destacó que la agenda del ALBA ha sido la de alfabetizar y apoyar a los campesinos, a los pobres, o sea la agenda de la vida.
Sin embargo, destacó que la brutalidad y el terrorismo de las fuerza más reaccionarias de Honduras nos han obligado a tomar otra agenda de discusión.
Daniel denunció la clausura de los medios de comunicación y las televisoras hondureñas a la par del golpe de estado en contra del presidente Manuel Zelaya, y el secuestro de la canciller Patricia Rodas, cuya suerte aun se desconoce.
A su llegada, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, sostuvo que «no reconocerá a ningún Gobierno que no sea el del Presidente Manuel Zelaya, democráticamente elegido».
A Managua también llegó Bruno Rodríguez, ministro cubano de Relaciones Exteriores, quien denunció «el carácter criminal, brutal de este golpe de Estado» y responsabilizó a las Fuerzas Armadas por la vida de la canciller hondureña, Patricia Rodas.El presidente Evo Morales también participará en la reunión extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), para evaluar el golpe militar que se gestó en Honduras para derrocar a su presidente.
Morales pidió la restitución inmediata del presidente hondureño Manuel Zelaya, secuestrado por militares y trasladado a Costa Rica después del golpe perpetrado hoy en la madrugada.
Pido la restitución inmediata del presidente Zelaya. Ya no estamos en tiempos de dictaduras», afirmó el gobernante boliviano al ratificar que se debe reponer el orden institucional en Honduras».
El primer mandatario boliviano ya había realizado horas antes un llamado urgente a los organismos internacionales, a los movimientos sociales y a los presidentes y gobiernos democráticos del mundo para condenar y repudiar el golpe militar.