Un hombre, su madre y un vecino de ambos fueron acusados en un juzgado de Managua, por explotar sexualmente a una niña en el municipio de Quilalí, Nueva Segovia, desde el año 2012.
El caso podría ser catalogado como un delito más de este tipo, pero en realidad es peor porque los principales responsables del hecho son el padre y abuela paterna de la pequeña víctima.
De acuerdo con la acusación, la muchachita era vendida por los tres señalados para que sujetos depravados abusaran sexualmente de ella.
El libelo acusatorio detalla que el salvaje de iniciales B.Q.A., de 36, padre de la víctima, fue el encargado de comenzar a ofrecer a su hija a otros hombres a cambio de dinero.
La niña era amarrada a la cama para que no escapara y su abuela se encargó de amordazarla varias ocasiones para evitar que gritara.
Conforme a la denuncia, la víctima actualmente tiene 16 años, pero era violada desde que tenía apenas 4 años.
Tras admitir todas las pruebas, el juez Roger Sánchez, Especializado en Violencia, remitió a juicio a los tres sujetos por el delito de trata de personas con fines de explotación sexual y violación.