Javier y su hermano Anselmo Martínez fueron declarados culpables del delito de femicidio y asesinato respectivamente, de quien en vida fue la señora Zaira Fonseca Bravo, ocurrido el pasado 24 de agosto, en su casa ubicada en la zona cinco, de Nueva Guinea, Caribe Sur.
En la acusación del Ministerio Público, se señala que Javier, quien era el esposo de Zaira se confabuló con su hermano Anselmo, para que este llegara a su casa a cometer el crimen, dejándole la puerta del patio abierta, mientras él salía a echar combustible a su moto.
Doña Zaira fue asesinada de ocho balazos, crimen que conmocionó a los habitantes de Nueva Guinea.
El juez penal de Nueva Guinea, doctor Carlos Molina, leerá la sentencia a los Martínez el próximo 17 de diciembre.