El joven estadounidense Jonathan Fair, de 19 años de edad, fue acusado formalmente de homicidio tras haberle propinado una tremenda golpiza a su hija de tan sólo 4 años, quien accidentalmente derramó un vaso de jugo sobre su consola de Xbox en el Estado de Illinois.
Según las investigaciones, el cruel asesinato ocurrió el pasado 13 de Diciembre cuando el jovencito perdió los estribos por completo y descargó su furia a golpes y patadas contra la pequeña. Al verla inconsciente y mal herida el descarado la trasladó a un hospital cercano aduciendo que había sufrido un accidente casero.
Días después la menor falleció en el hospital donde las autoridades determinaron que se trató de un homicidio luego que éste energúmeno aprovechó la ausencia de la mamá de la menor en la vivienda. Llegó al punto de patearla sobre las escaleras de la vivienda.
Ahora el sujeto está en prisión con una fianza de 5 millones de dólares y podría ser condenado a la pena de cadena perpetua. Su juicio será el próximo 17 de Febrero del 2019.