Una niña de 5 años fue llevada por su progenitora a un centro de salud en Río Negro, Argentina, por tener una infección en la parte inferior de su cuerpo; sin embargo los médicos descubrieron que la menor realmente había sido abusada sexualmente.
Los doctores de la Clínia Privada de Cipolletti le comunicaron a la mamá que su pequeña presentaba signos de desgarro en su región anal, lo que indicaba que había sido ultrajada sexualmente de manera violenta.
Ahora la niña se encuentra en una unidad de cuidados intensivos en la ciudad de Viedna donde tendrá que ser sometida a una cirugía.
Un caso extraño
Lo extraño del caso es que la familia de la menor ha entorpecido las investigaciones y aseguran que su hija nunca fue violada. Sin embargo la policía argentina allanó su vivienda y descubrieron rastros de sangre en una toalla, varias sábanas y hasta un colchón quemado.
Todo hace indicar que algún familiar es el responsable de tan bochornoso hecho por lo que ahora la fiscalía buscará la forma de quitárselas legalmente.