En las últimas horas, el huracán Lee alcanzó la categoría 5 en la escala Saffir-Simpson, colocándose como la primera tormenta de esta magnitud de la temporada del Atlántico.
A pesar de su imponente fuerza, se encuentra avanzando sobre mar abierto, en dirección al norte de las Antillas Menores.
Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH), no hay expectativas de que Lee toque tierra. Sin embargo, alertan sobre la posibilidad de que se experimenten condiciones propias de tormenta tropical en algunas islas.
El viernes, a las 5:00 a.m. (Hora del Este de EE.UU.), Lee se situaba a 1,015 kilómetros al este del norte de las Islas de Sotavento. Sus vientos máximos sostenidos alcanzan hasta 270 kilómetros por hora y presenta un movimiento de traslación hacia el oeste-noroeste a una velocidad de 22 kilómetros por hora.
El CNH ha definido a Lee como «un peligroso huracán de categoría 5». Se prevé que a medida que se acerque a las Islas de Sotavento, Islas Vírgenes y Puerto Rico, podría generar marejadas y corrientes de resaca con potencial de ser mortales. Además, las olas peligrosas y corrientes de resaca podrían afectar gran parte de la costa este de Estados Unidos a partir del domingo.
Hasta la fecha, Lee representa la duodécima tormenta con nombre de esta temporada de huracanes del Atlántico, que tiene lugar del 1 de junio al 30 de noviembre, teniendo su punto álgido durante el mes de septiembre.
Por otro lado, más cerca de Cabo Verde, en África, se encuentra la tormenta tropical Margot. Esta se convirtió en la decimotercera tormenta con nombre después de formarse el jueves por la noche.
Margot se sitúa a unos 465 kilómetros al oeste-noroeste de las islas de Cabo Verde y presenta vientos de hasta 65 kilómetros por hora. Se espera que alcance la categoría de huracán durante el fin de semana.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica ha emitido un pronóstico para esta temporada, anticipando entre 14 y 21 tormentas con nombre. De estas, se estima que entre seis y 11 evolucionarán a huracanes. Y, de ese total, entre dos y cinco podrían transformarse en huracanes mayores.