Por cuarto día consecutivo España ha logrado reducir el número de muertes por coronavirus, lo que aumenta la esperanza de que los países del sur de Europa estén finalmente conteniendo la pandemia del COVID-19.
Según las autoridades, en las últimas 24 horas, un total de 637 personas murieron, pero en días anteriores las cifras superaban los 900.
Otra buena noticia es que el número de contagios se desaceleran en España, el segundo más afectado del mundo en número de muertos por el COVID-19 detrás de Italia, con 13,055 decesos entre las 135,032 personas contaminadas.
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Más de 40,000 pacientes salieron del hospital, lo que representa cerca del 30% de los casos confirmados, indicó María José Sierra, del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias.