El derrumbe de un dique en la región de Krasnoyarsk, en Siberia, Rusia ha acabado con la vida de al menos quince personas. Más de diez siguen desaparecidas.
El acontecimiento tuvo lugar en las inmediaciones de la localidad de Schetínkino, en el río Seiba el pasado viernes.
Según autoridades locales todo sucedió mientras los trabajadores dormían. Los equipos de rescate señalan que la cifra de muertos seguirá en aumento.