Un total de 16 personas murieron este domingo cuando el avión en que viajaba un grupo de paracaidistas se estrelló en la localidad de Menzelinsk, ubicada al este de la república rusa de Tartarstán.
El avión ligero L-410, propiedad de un club aéreo, se estrelló poco después de despegar a un kilómetro del aeródromo de la ciudad de Menzelinsk a eso de las 9:23 (Hora de Rusia).
Los bomberos lograron contener las llamas de la aeronave y rescataron con vida a 7 supervivientes, según el informe del Ministerio de Emergencias.
Todo apunta a un fallo técnico como la causa más probable del siniestro, según apuntan las autoridades de Rusia.
El L-410 es un avión de dos motores, de fabricación checa, que puede transportar hasta 19 pasajeros o bien 1.8 toneladas de carga y cuenta con una autonomía de vuelo de hasta 1,500 kilómetros.