Un grupo de 15 personas fue condenado a cumplir dos años de cárcel en Francia, tras ser encontrados culpables de la comercialización fraudulenta de carne de caballos, no apta para el consumo humano.
Los detenidos estaban acusados de violar las reglas sanitarias europeas sobre el comercio de carne de caballo y por falsificación de documentos entre 2010 y 2015.
Según algunos medios, los condenados son de nacionalidades, francesa, belga y neerlandés.
Este caso es el mayor escándalo de venta de carne de caballo en la última década.
Las autoridades retiraron del mercado de toda Europa, miles de bandejas de carne, al parecer de caballo; tras la investigación que determinó la existencia que este producto que se ofrecía como carne de res.