La tarde de este domingo fue encontrada semi enterrada la cabeza de Karla Patricia Estrada Rostrán, de 32 años de edad, en un predio montoso colindante con el Reparto Schick, en Managua.
La cabeza estaba enterrada en un hueco de apenas 18 centímetros de profundidad que Francisco Ariel Mercado cavó superficialmente a 68 metros al sur-oeste de donde dejó el cuerpo decapitado de su compañera de vida.
El Comisionado Mayor Sergio Gutiérrez, Segundo Jefe de la Policía en Managua, detalló que días atrás estuvieron a escasos metros de dar con el punto, pero el homicida no logró ubicar el sitio, por lo que se orientó rozar el lugar para que Francisco Ariel Mercado precisara el sitio del entierro.
El cráneo fue trasladado al instituto de Medicina Legal donde se le practicará la prueba de ADN para confirmar en su totalidad que era la cabeza de Karla Patricia Estrada, y posteriormente entregarla a sus familiares para darle cristiana sepultura.
En el lugar del hallazgo se mantuvo esposado y casi paralizado Francisco Ariel Mercado quien la noche del pasado 10 de agosto asesinó de 59 puñaladas a Karla Patricia Estrada, una vez que esta le pidió que le pusieran fin a la relación sentimental que sostuvieron por más de 13 años.
Posterior al crimen, el femicida con su misma bayoneta le arrancó la cabeza a la fémina cuyo cuerpo fue encontrado el 17 de agosto, y sepultado en el cementerio del barrio Milagro de Dios el pasado 24 de agosto.
Tras la captura la noche del pasado jueves 31 de agosto en un operativo policial ejecutado en Nandaime, Granada, Francisco Ariel Mercado fue llevado ayer sábado a los juzgados de Managua donde se declaró culpable del delito de femicidio, programándosele la lectura de sentencia para el próximo 7 de septiembre.
Durante la audiencia a cargo de la doctora Aleyda María Irías Mairena, del Juzgado Segundo Especializado en Violencia de Género, Francisco Ariel Mercado expresó llorando “estoy arrepentido de lo que hice. Quiero pedirle perdón a Dios y a mis hijas, admito los hechos de los que se me acusan por mi libre y espontánea voluntad”.
Tras escuchar que se declaró culpable, la Fiscalía pidió la pena de 30 años de cárcel para el acusado, basado en las reformas a la Ley 779, en tanto el abogado defensor pidió apenas 10 años, tomando en cuenta que admitió su culpa, y solicitó que lo manden a cumplir la sentencia al sistema penitenciario de Granada, por miedo a ladrones del reparto Schick recluidos en La Modelo.
Por su parte, dos hijas de la pareja que estuvieron presentes en la vista judicial expresaron que ellas ni Dios nunca perdonarán a Francisco Mercado por lo que le hizo a su madre, renunciaron a reconocerlo como su progenitor y pidieron a la juez que le dicte cadena perpetua.
“Que nunca salga de la cárcel”, pidieron Jennifer y Nathalia Estrada Mercado, a la vez que expresaron que no deberían de aplicarle los beneficios de reducción de condena por días trabajados o buen comportamiento, ya que no se lo merece.
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