Este 19 de julio, desde la histórica Plaza de la Fe, los Copresidentes de la República de Nicaragua, Comandante Daniel Ortega y Compañera Rosario Murillo, presiden el acto central en conmemoración del 46 aniversario del triunfo de la Revolución Popular Sandinista.
Acompañan esta emblemática celebración delegaciones oficiales de países hermanos como Palestina, Abjasia, la República Popular China, Myanmar, Cuba, la República Popular Democrática de Corea, Argelia, Belarús, la Federación de Rusia.
También delegaciones de la República Bolivariana de Venezuela, Vietnam, Turquía, Burkina Faso, Honduras, Costa de Marfil y Kuwait.
Asimismo, se dan cita representantes del cuerpo diplomático acreditado en el país, funcionarios de los Órganos del Estado, autoridades institucionales, protagonistas de la Juventud Sandinista 19 de Julio y familias nicaragüenses en un ambiente de unidad, solidaridad y compromiso con la causa revolucionaria.
Desde la Plaza de la Fe, el pueblo nicaragüense reafirma la fuerza y fortaleza de la Paz que resguardamos
La Compañera Rosario Murillo, Copresidenta de Nicaragua, se dirigió a las familias nicaragüenses destacando que este 19 de Julio representa la fuerza y la fortaleza de la paz que el pueblo resguarda y defiende con firmeza.
«Esta, compañeros, compañeras, es la fuerza de Paz, lo vemos, lo sentimos, lo sabemos. Aquí no se rinde nadie. Aquí no se rinde nadie. ¡Qué viva la juventud nicaragüense! ¡Qué vivan las mujeres, la familia, el pueblo heroico y victorioso de nuestra Nicaragua bendita, siempre sagrada y siempre libre! ¡Que vivan los combatientes de la Paz! ¡Que vivan los combatientes de la paz! ¡Que viva la paz! ¡Que viva el cariño! ¡Que viva nuestra Nicaragua heroica, bendita, victoriosa! ¡Que viva el Frente Sandinista de Liberación Nacional! ¡Que viva la Revolución Popular Sandinista! ¡Que viva Daniel! ¡Que viva Daniel! ¡Que viva Daniel! ¡Que no lo ven! ¡Que no lo ven! ¡Aquí no se rinde nadie! ¡Viva la paz!», exclamó la Copresidenta de Nicaragua.
Destacó que desde la «Plaza de la Fe, en esta fiesta de la fe, en esta Nicaragua bendita, soberana, siempre digna y siempre libre desde el corazón de nuestro pueblo orgulloso, valiente y heroico que ha protagonizado los más gloriosos combates contra toda la forma de dominación, explotación e intromisión en nuestros asuntos propios en esta Nicaragua que ha luchado y vencido a los imperialistas de la tierra, hablamos con el alma digna de los pueblos y de la conciencia alzada de cada nicaragüense valeroso, decente, honrado y honroso que hemos sabido transitar todos los caminos y todas las encrucijadas de nuestra historia con las banderas en alto proclamando la victoria de la razón, del corazón y del gran espíritu que es amor intenso e inmenso, ese gran espíritu que habita y anima la fuerza y fortaleza de esta patria gloriosa donde hemos ido siempre más allá, batallando por la paz, la libertad y los derechos de todos».
La Compañera Rosario Murillo enfatizó que «desde esta Plaza de la Fe, donde se muestra con orgullo infinito la fuerza, la fortaleza de la paz que resguardamos y defendemos celosamente, nos reunimos, congregamos, abrazamos, hablamos y nos entendemos porque sabemos que la concordia es nuestro deber, nuestra responsabilidad sagrada y que la paz que tanto nos cuesta y por la que tantos centenares de miles de nicaragüenses hemos dado la vida es nuestro más elevado patrimonio cultural, patrimonio heroico y la esencia de nuestra más profunda y genuina convicción de triunfo y de futuro».
“Desde esta Plaza la Fe, donde estamos viviendo el siempre 19 en el año 46 del gran triunfo de la Revolución Popular Sandinista que cambió para siempre la historia de Nicaragua. Desde esta Plaza la Fe, llena de las almas de los miles y miles de hermanas y hermanos que dieron su vida para que hoy estemos aquí bendiciéndoles y proclamándoles héroes de todos los tiempos», subrayó.
Enfatizó que «desde esta Plaza la Fe vibra el amor patrio, el amor a Nicaragua, el amor a los pueblos del mundo, el hermanamiento con todas las luchas meritorias, la gran fraternidad de los derechos, de las esperanzas sublimes. Desde esta Plaza la Fe, en un mundo que debemos seguir cambiando para que cada vez sea mejor, proclamamos, reiteramos que Nicaragua es y seguirá siendo libre porque somos un pueblo que ama, late, canta, sueña, lucha, combatientes permanentes del amor y de toda nuestra condición cristiana, socialista y de alegría solidaria».
La Copresidenta de Nicaragua indicó que «desde esta plaza La Fe donde año con año santificamos los caminos de merecimientos y logros del pueblo bienaventurado y capaz de nuestra Nicaragua que reza a Jesucristo y habla español, miskito, creole, garífuna, mayangna, ramas. En esta Nicaragua, de todas y todos, nos declaramos en batalla permanente con los pueblos libres, solidarios, hermanables y decididos del mundo, complementándonos como comunidad humana, como es y debe ser en combate frontal contra la pobreza en toda su forma y por el respeto que todos merecemos a nuestros caminos, a nuestras rutas, a nuestras culturas, a nuestras formas de ser, vivir y dar vida para alcanzar nuestros sueños, realizar nuestros sueños y servir en unión por el bien común a las urgentes, cada vez más urgentes transformaciones que debemos forjar y alcanzar, forjar y alcanzar por nuestra dignidad, independencia, soberanía y, por supuesto, bienestar».
Además, se refirió de la celebración de la Paz de este 19 de julio donde se cumplen 46 años del Triunfo de la Revolución Popular Sandinista.
«En esta celebración de la libertad, la alegría, la unidad y la fuerza de la paz. Saludamos a todos los pueblos del mundo. Nos hermanamos con los pueblos del mundo y nos convocamos como cada día a seguir luchando juntos para cambiar, para frenar la injusticia, para borrar y detener tanta mentira para que no se continúe falsificando la historia y la memoria o traficando con las identidades, patrimonio y riquezas de nuestros pueblos y comunidades», remarcó.
Recordó que «estamos a 46 años del histórico, memorable y singular triunfo del heroísmo popular en Nicaragua. Hace tanto de aquel 19 de julio, hemos vivido tanto y sabemos que hemos nacido y seguimos naciendo al despertar, a los amaneceres, a las auroras del mundo nuevo donde podamos, porque podemos habitar nuestros derechos, alcanzar indispensables plenitudes como esencia, naturaleza y condición indiscutible. Son melodías y sintonías inefables pero reales y bendecidas por la sangre santa de tanta lucha y por el eterno vigor de tanta victoria».
«Nuestra Nicaragua, territorio libre, gloriosa tierra de guerreros de paz, saluda con alegría honrosa y esperanza ciertas a todos los pueblos que luchamos sin claudicaciones por el otro mundo que ya es imprescindible y a las delegaciones que los representan en este acto formidable de compromiso, de liberación y de vocación fraternal, solidaria y complementaria de bien común que tanto necesita el planeta y la humanidad», finalizó la Copresidenta de Nicaragua, Compañera Rosario Murillo.
El hermano querido compañero Brayan Wilson compartió un hermoso y elocuente mensaje dirigido al pueblo nicaragüense y a los pueblos del mundo, expresando admiración y respeto por Nicaragua, su historia y su firme compromiso con la paz y la dignidad.
