Aún son pocos los datos que se conocen sobre el planeta extrasolar potencialmente habitable Kepler-186f. Sin embargo, científicos de la Universidad de Puerto Rico ya imaginan cómo sería un atardecer allí.
La NASA confirmó este jueves el descubrimiento en la constelación del Cisne de un planeta, que bautizaron Kepler-186f, en el que podría existir agua en forma líquida y vida.
Los científicos afirman que es del tamaño de la Tierra y que la luz de su sol es más tenue que la del nuestro. Y es que Kepler-186f tarda 130 días en completar la órbita alrededor de su estrella y recibe un tercio de la energía que la Tierra recibe del Sol.
Basándose en estos datos y suponiendo que hubiera agua en el exoplaneta (lo cual podría tardar años en averiguarse), científicos del Laboratorio de Habitabilidad Planetaria de la Universidad de Puerto Rico han publicado una imagen de cómo sería un paseo al atardecer en una playa de Kepler-186f.
A la izquierda aparece una hermosa puesta de sol del Caribe vista desde el planeta Tierra y a la derecha desde Kepler- 186f.
Debido a la poca energía y a la gravedad, las plantas serían algo más bajas que las nuestras y tendrían un color verde oscuro o rojizo, apunta el portal Espacio Profundo. Según sugieren algunos expertos, el ‘nuevo’ planeta sería como una versión de la Tierra un poco más fría que nuestro planeta y con océanos poco profundos.
Sin embargo, otros astrónomos sugieren que Kepler-186f podría ser un planeta frío y seco parecido a Marte o un mundo cubierto de nieve, como lo fue la Tierra en el pasado.