De cuatro balazos y varias puñaladas fue asesinado la noche del sábado el señor Denis Caballero Mairena, de 65 años de edad, a manos de sus propios hijos Denis y Marvin Vinicio, ambos de apellidos Caballero Flores, de 26 y 25 años respectivamente, en la comarca la Unión, en Wiwilí, departamento de Jinotega.
Según las investigaciones preliminares, Denis y Marvin llegaron a la casa de su padre y aprovechando que estaba solo, lo sacaron al patio y le realizaron los disparos y las puñaladas, dejándolo muerto en un charco de su propia sangre.
De manera extraoficial se conoció que ambos desnaturalizados habían amenazado de muerte a don Denis Caballero, porque supuestamente después de separarse de la madre de ellos, nunca les dio “ni sal para un jocote”.
En la casa del ahora occiso habitaban su hija Guadalupe Caballero, de 37 años, y su nieto José Isaac Gonzales Caballero, de 18 años, quien caminaba rumbo al inmueble cuando escuchó los disparos y al llegar a la propiedad encontró el cadáver de su abuelo.
Habitantes de la zona dijeron que don Denis Caballero Mairena se dedicaba al cultivo y venta de café y días atrás había vendido varios quintales del grano de oro en un acopio de la zona, y presuntamente el dinero obtenido se lo robaron sus hijos antes de quitarle la vida.
Autoridades policiales investigan el paradero de Denis y Marvin Caballero Flores para ponerlos a la orden del Ministerio Público y procesarlos por el delito de parricidio.