En el hospital Lenin Fonseca, en Managua, se rindió ante la muerte el joven Uriel Enrique Bonilla Jarquín, de 24 años de edad, quien el pasado 17 de diciembre fue baleado supuestamente por sujetos que se movilizaban en un taxi.
El hecho ocurrió en la cuarta etapa del barrio Hialeah, en la ciudad capital, por motivos que aún se desconocen.
Uriel Enrique Bonilla recibió disparos en la espalda cuando salió de su casa a comprar fritanga en un negocio cercano.
El caso es investigado por la policía.