Un joven de apellidos Mejía González, de unos 18 años de edad, decidió terminar con su existencia, tomando una tableta para curar frijoles en el municipio de Siuna, Caribe Norte, la madrugada de este sábado.
Cazadores de noticias informaron que aparentemente el joven padecía de depresión lo que lo había sumido en el consumo de bebidas alcohólicas, y luego de salir a tomar licor la noche del viernes, su mamá se negó a abrirle la puerta.
Eso hizo que el joven se molestara y decidiera poner fin a su vida, ingiriendo la tableta de Fosfina que le destrozó su organismo en cuestión de minutos.
La vela del infortunado se está realizando en el barrio La Arenera, en el municipio de Siuna.