El ciudadano Brayan Hernández Pineda, de 18 años, fue decapitado por sujetos desconocidos, en la zona rural del municipio de San José de Bocay, en el departamento de Jinotega.
Lugareños describieron que el cadáver presentaba múltiples machetazos y desprendimiento de piel.
El ahora occiso era originario de la comarca Kantayawas, ubicada en Bocay, Jinotega, donde las autoridades policiales investigan la identidad y paradero de los autores del crimen atroz a fin de esclarecer el caso.