Éste domingo dio su último suspiro de vida, el borrachito Sergio Antonio Jarquín Lara, de 40 años, después de sufrir un letal infarto cardíaco, cuando descansaba en su casa ubicada, de donde fue la Pepsi, 2 cuadras abajo y una al lago en el barrio La Quinta Nina, Managua.
Los familiares de Sergio Antonio, al que llamaban de cariño “Chello”, firmaron una carta de desistimiento para que el cadáver no fuera trasladado a Medicina Legal, pues están conscientes que murió por tanto ingerir licor.
Agentes policiales de la estación Cuatro llegaron al lugar para investigar a fondo el caso y tras comprobarse que no hubo mano criminal en el hecho, se retiraron.