Un estudio científico confirmó que la combinación del anticonceptivo oral Yasmin y una dosis baja del diurético espironolactona es un tratamiento seguro y efectivo para las mujeres con acné facial grave.
Los investigadores analizaron la seguridad y la efectividad del tratamiento del acné facial grave en 27 mujeres a través de una combinación de espironolactona y Yasmin, un contraceptivo combinado con estrógeno y una versión de progestina conocida como drospirenona.
Al final del estudio, el 11% de las mujeres no tenía lesiones de acné, el 74% había mejorado significativamente, el 7.4% lo había hecho moderadamente y el 7.4% no registraba cambio alguno.
No se observó aumento de peso significativo ni irregularidades menstruales. Tampoco hubo efectos secundarios los suficientemente graves como para suspender el medicamento.
La combinación de espironolactona, estrógeno y drospirenona es «atractiva para controlar el acné femenino moderado a grave de origen hormonal», concluyeron los expertos.
Ellos consideran que las hormonas pueden influir en la aparición del acné.