Un equipo técnico especializado comenzó la delicada labor de restauración de una importante imagen religiosa en la Iglesia de Santo Domingo, tras completar los estudios preliminares que revelan la complejidad del proyecto.
Los trabajos iniciales permitieron identificar un mural de grandes dimensiones y considerable grosor, una pared de soporte construida con mampostería de ladrillo de barro y varios puntos de anclaje severamente afectados por la corrosión.
El proceso de restauración contempla tres fases críticas:
- Evaluación estructural de la pared soporte
- Análisis y posible reforzamiento de los puntos de anclaje
- Valoración y restauración de la escultura del Cristo Crucificado
Para garantizar la calidad de la restauración, participarán Ingenieros estructurales, arquitectos especializados y restauradores de Bienes Culturales Muebles.
La intervención se realizará respetando la originalidad del bien cultural, los materiales apropiados para la restauración, técnicas que eviten futuros daños y criterios de preservación patrimonial.
El proyecto busca preservar este importante patrimonio cultural religioso para las futuras generaciones nicaragüenses.