Un total de 40 personas murieron y otras 18 se encuentran desaparecidas tras el paso de la Tormenta Kompasu por el archipiélago de Filipinas, donde causó deslaves e inundaciones.
Más de 43 mil personas abandonaron sus hogares mientras que 7,399 viviendas resultaron dañados por completo, según el último balance del Consejo Nacional de Reducción del Riesgo y Gestión de Desastres de Filipinas.
La zona más afectada es la provincia de Ilocos Sur donde hubieron 14 víctimas fatales y 5 personas desaparecidas debido a las intensas inundaciones.
Mientras que en la provincia de Benguet hubieron 9 muertos, en Pangasinán hay 7 fallecidos; otros 5 en la provincia de Las Paraguas y otros 5 en Ilocos Norte, Cagayán y La Unión.
Se estima que los daños causados a la agricultura son unos 64 millones de dólares.