El Tifón Rai dejó un saldo fatal de 24 muertos y más de 330,000 personas evacuadas al tocar tierra en las Filipinas.
Veinte de las víctimas mortales ocurrieron en la provincia de Cebu y el resto de fallecidos en las provincias de Negros Occidental y otras tres provincias de la región de Mindanao, al sur del país.
Se estima que unas 5 millones de personas se quedaron sin el servicio de energía eléctrica en todo el país.
El tifón avanza hacia al oeste con vientos máximos de 155 kilómetros por hora y ráfagas que superan los 235 kph.
Más de 9 millones de personas viven en las zonas donde pasará el ciclón.