Peter Graff, jefe de la misión activada en septiembre de año pasado, señaló que el regreso de la enfermedad demuestra su peligrosidad y la importancia de ser rigurosos en las pruebas y diagnósticos.

Graff reconoció la rápida reacción del gobierno, que reactivó el mecanismo de vigilancia. Después de declararse que el país estaba libre de ébola el 9 de mayo, la autoridades liberianas han encontrado tres nuevos casos. Solo seis semanas pasaron sin reportes de contagios.
Aunque lejos de los niveles de contagio mostrados en 2014, el ébola continúa como una grave amenaza de salud, ante lo cual la Unmeer recuerda la necesidad de rastrear los contactos de los nuevos casos, garantizar los entierros seguros y no estigmatizar a las naciones afectadas.