El Papa Francisco se disculpó públicamente este miércoles durante la oración del Ángelus por haber perdido la paciencia cuando una mujer lo forzó a darle la mano y el le dio un golpe en el antebrazo.
Resulta que el pasado martes el pontífice reprendió a una mujer que lo agarró del brazo y lo haló bruscamente mientras saludaba a los fieles católicos reunidos en la Plaza San Pedro, tras la última misa del 2019.
La mujer, de origen asiático, estaba detrás de las barreras de seguridad y cuando el Papa pasó a su lado ella logró agarrarlo con sus dos manos para poder detenerlo y hacerle muy probablemente una petición.
El movimiento de la mujer casi provoca que El Papa, de 83 años de edad, perdiera el equilibrio por lo que la golpeó en la mano muy visiblemente irritado mientras sus agentes de seguridad llegaron en su ayuda.
«Tantas veces perdemos la paciencia. A mí también me ocurre. Me disculpo por el mal ejemplo dado ayer», declaró Francisco.
Francisco denuncia la explotación del cuerpo de la mujer
En la primera misa del año 2020, el Papa Francisco dijo que la humanidad debería poner en el centro a las mujeres porque son fuente de vida.
El pontífice denunció que el cuerpo de la mujer se sacrifica en altares profanos como la publicidad, el lucro o la pornografía y denunció que la maternidad es continuamente humillada por una sociedad que sólo busca el crecimiento económico.
El cuerpo de la mujer debe ser liberado del consumismo, debe ser respetado y honrado. Es la carne más noble del mundo, pues concibió y dio a luz al Amor que nos ha salvado, expresó.
Toda violencia infligida a la mujer es una profanación de Dios, nacido de una mujer. La salvación para la humanidad vino del cuerpo de una mujer: de cómo tratamos el cuerpo de la mujer comprendemos nuestro nivel de humanidad, declaró.