El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció este martes la declaración de «Emergencia Sanitaria a nivel nacional» debido a la epidemia de sarampión que afecta al país. La decisión fue tomada tras una reunión urgente del Consejo Nacional Estratégico para Emergencias Sanitarias, en respuesta al rápido aumento de casos y el alto riesgo de propagación de esta enfermedad.
Arce explicó que esta medida permitirá fortalecer la capacidad de respuesta del Estado mediante acciones concretas y coordinadas con los gobiernos departamentales, municipales y organizaciones sociales. En este contexto, se activará el Plan Estratégico de Atención de Emergencia Sanitaria para la Epidemia de Sarampión, cuyo objetivo principal es interrumpir la transmisión del virus.
El plan contempla acciones integradas y multisectoriales, con un enfoque en la cobertura masiva de vacunación. Además, el mandatario recordó que el sarampión representa una amenaza que ha encendido las alertas sanitarias en todo el continente, por lo que instó a la población boliviana a colaborar de manera responsable con las autoridades de salud, cumplir con el esquema de vacunación y mantenerse informada a través de los canales oficiales.
En una conferencia de prensa, la ministra de Salud y Deportes, María Renée Castro, confirmó la gravedad de la situación y destacó que el sarampión es incluso más contagioso que el Covid-19. Según la ministra, el miércoles de la semana pasada se reportaron 28 casos confirmados, pero este martes la cifra ya había aumentado a 60 casos, con dos más en investigación.
La ministra advirtió que el virus tiene una capacidad de propagación extremadamente rápida, lo que ha llevado al gobierno a implementar mecanismos de bloqueo epidemiológico y acciones de vacunación inmediata en las zonas afectadas. Estas medidas se aplicarán inicialmente en los departamentos y municipios donde ya se han confirmado casos, con el objetivo de contener la expansión del virus.
Como parte de las acciones inmediatas, la ministra convocó a los servicios departamentales de salud a una reunión de emergencia para evaluar las estrategias locales de lucha contra la enfermedad. Este encuentro busca garantizar que las medidas adoptadas sean efectivas y estén adaptadas a las necesidades específicas de cada región.
El presidente Arce y la ministra Castro coincidieron en la importancia de la responsabilidad ciudadana para superar esta crisis sanitaria. Cumplir con el esquema de vacunación no solo protege a quienes reciben la vacuna, sino que también ayuda a crear una barrera de inmunidad colectiva que puede frenar la propagación del virus.
El gobierno boliviano ha reiterado su compromiso de garantizar el acceso a la vacuna para toda la población, especialmente para los grupos más vulnerables, como los niños pequeños, las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades crónicas.