Este sábado se realizará una misa cerrada al público en la catedral Notre Dame, la primera después del incendio que la asoló hace dos meses.
La misa será oficiada por el arzobispo Michel Aupetit y tendrá lugar en una capilla ante “un número limitado de personas, por razones de seguridad evidentes”.
Sólo habrá una veintena de asistentes, entre ellos curas y canónigos de la catedral. El monumento emblemático de la capital francesa, Notre Dame resultó parcialmente destruida por un feroz incendio el 15 de abril del presente año.
La fecha de la misa, la primera desde el desastre, fue escogida porque es la fiesta de la Dedicación, que conmemora la consagración del altar de la catedral y que normalmente tiene lugar el 16 de junio.