Una tienda de UPS, ubicada en Kendall un suburbio de Miami, ha sido el blanco de críticas y hasta amenazas luego que una clienta denunció haber sido discriminada por uno de sus empleados simplemente porque no hablaba inglés.
La ciudadana cubana Rebecca Prinstein, de 47 años, había llegado a dicha tienda para retirar 25 dólares de devolución por un paquete que envió por UPS y que no fue entregado a su destinatario.
Sin embargo fue tratada tan mal por el empleado de dicha tienda que publicó en redes sociales un video donde muestra cómo fue abusada y corrida.
«¡Maldito español! Yo sabe hablar, pero tú no sabes hablar inglés (…) fuera de mi tienda. Váyase», le dijo el hombre a la señora.
El video se volvió viral y fue publicado por varios medios estadounidenses por lo que varias personas han criticado duramente al establecimiento ubicado en 14629 SW 104th St, Miami acusándolo de xenófobo y racista.
«Él me tiene que pedir perdón, es lo que estoy buscando», aseguró la señora en un mar de lágrimas.