Dos individuos acusados de la muerte de un conductor de autobús en Francia fueron sentenciados a 13 y 15 años de prisión. El incidente, que sucedió en julio de 2020, surgió tras un enfrentamiento por el uso obligatorio de mascarillas debido a la pandemia del coronavirus.
El 5 de julio de 2020, en medio de la crisis sanitaria, los acusados abordaron el bus conducido por Philippe Monguillot. Al reclamarles que se colocaran la mascarilla o, en su defecto, abandonaran el vehículo, los individuos reaccionaron violentamente.
En total, cuatro personas estuvieron involucradas en la agresión, que dejó a Monguillot inconsciente y gravemente herido en el suelo.
Después de un intenso debate que duró casi cinco horas, el Tribunal de lo Penal de los Pirineos Atlánticos dictaminó que Wyssem Manai y Maxime Guyennon son culpables del homicidio involuntario de Monguillot.
Manai, de 25 años, recibió una pena más severa de 15 años al ser identificado como el autor material del golpe que resultó fatal para el conductor.
El juicio estuvo marcado por la emotividad y el dolor. Las imágenes del ataque y los conmovedores testimonios de la viuda, Véronique Monguillot, las tres hijas de la víctima y varios testigos, pintaron un cuadro desolador de la tragedia.