La niña Alondra Monserrat Saravia Mejía, de 8 meses de nacida, murió electrocutada en la casa que habitaba en el barrio Marvin Salazar, de Tipitapa, la mañana de ayer jueves.
Cazadores de noticias informaron que la niña andaba gateando en su humilde vivienda cuando tocó las láminas de zinc que servían como paredes, las cuales estaban energizadas.
Al escuchar su llanto, sus padres Aura Estela Mejía y Darwin Saravia Alemán pidieron ayuda, y los bomberos Unidos la trasladaron al Hospital Yolanda Mayorga, adonde lamentablemente llegó sin los signos vitales.