Para el próximo 26 de septiembre fue programada la audiencia inicial en contra del comerciante Félix Pedro Almendárez Blandón, de 24 años, quien fue acusado por homicidio a título de dolo en perjuicio de Carlos Ernesto Martínez Espinoza, de 47 años, un reconocido trillizo de Belén, Rivas.
El acusado fue dejado en prisión preventiva ayer lunes por la doctora Eva Carolina Cano Saballos, Jueza Distrito Penal de Adolescentes, Audiencia y Especializado en Violencia de Rivas, después de admitir la acusación introducida por el Ministerio Público.
Según el libelo acusatorio, la noche del jueves 12 de septiembre Félix Almendárez conducía la camioneta marca Toyota, color plateado, placa MY 18-480, en estado de ebriedad y a exceso de velocidad, cuando chocó por detrás la moto con matrícula de Rivas 23-006 que manejaba la víctima.
Lugareños informaron que tras la colisión el trillizo fue arrastrado unos 200 metros por el conductor de la camioneta, quien después huyó, dejando el cuerpo a un lado de la vía, junto a la moto que quedó completamente destruida en el kilómetro 105.8 de la carretera Panamericana Sur.
En un rápido operativo, la Policía logró capturar a Félix Almendárez Blandón, en el municipio de Tola, en la zona limítrofe con el municipio de Nandaime, departamento de Granada.
Al detenido, le fue realizada la prueba de alcoholemia dando positivo con 1.56 gramos de alcohol por litro de sangre, o sea andaba en completo estado de ebriedad.
La forense Hazel Yareth López, dictaminó que Carlos Martínez falleció por trauma craneal, politraumatismo y hemorragia masiva.
Carlos Ernesto Martínez Espinoza se ganaba la vida como moto-taxista y habitaba en la comarca Chacalapa, del municipio de Belén, hacia donde se dirigía, cuando fue muerto por el irresponsable que conducía borracho la camioneta.
La abogada defensora solicitó a la jueza de Rivas, permitir que su defendido enfrente el proceso en libertad, aduciendo que padece convulsiones y migraña debido a complicaciones neurológicas y como pruebas presentó algunas tomografías.
Ante la petición, la judicial ordenó que sea llevado al Hospital Gaspar García Laviana, para ser valorado y medicado, pero que permanezca bajo arresto, mientras se desarrolla el proceso.