El nicaragüense Luis Antonio Hernández González, de 27 años de edad, murió instantáneamente al explotar un almacén donde se guardaba pólvora, en la ciudad de San Lorenzo, en el departamento de Valle, en Honduras.
La bodega de pólvora «Cohetería Reyes», ubicada en el barrio Alta Verde, explotó en horas de la madrugada de hoy. Los bomberos encontraron el cuerpo del compatriota, el cual resultó completamente destrozado, durante las labores de enfriamiento.
Las estadísticas de Tu Nueva Radio YA revelan que en lo transcurrido de este año más de 100 nicaragüenses han muerto en distintas circunstancias en el extranjero, la mayoría en Costa Rica.