El nicaragüense Ricardo Hernández Guerrero, de 53 años, murió luego de caerle encima un auto que estaba reparando en un taller de mecánica en Atlanta, Georgia, Estados Unidos.
Ricardo Hernández era un transportista y mecánico originario de Nueva Guinea, Caribe Sur, y el pasado 12 de agosto viajó a Estados Unidos, adonde llegó el 28 del mismo mes, y empezó a laborar en un taller en Atlanta.
Un familiar de Hernández dijo que el pasado sábado al mediodía, Ricardo Hernández estaba haciendo un trabajo de mecánica cuando una gata hidráulica tuvo una falla y el vehículo le cayó sobre su cuerpo, prensándolo hasta matarlo.
El cuerpo del coterráneo Ricardo Hernández Guerrero se encuentra en una morgue de Atlanta, mientras su familia busca como repatriar sus restos para darle cristiana sepultura en Nueva Guinea, la tierra que lo vio nacer.