En el cementerio La Majada, en Tipitapa, fueron sepultadas este martes, doña Julissa Asunción Montoya Chavarría, de 46 años, y su hija Julissa de los Ángeles Morales Mayorga, de 13 años de edad.
Ambas fueron asesinadas la mañana del domingo, por Bayardo Morales Montoya, de 47 años, quien posteriormente se quitó la vida por la vía de la asfixia mecánica.
Bayardo Morales era ex pareja de doña Julissa, y padre de la niña de 13 años, y el femicidio, seguido de parricidio y suicidio, lo cometió en Villa Feliz, en el distrito 6 de Managua.
SEPULTADAS EN LA MISMA TUMBA
Orlando Ramírez Chavarría, hermano de doña Julissa, indicó que madre e hija serían sepultadas en la misma fosa, porque permanecieron juntas hasta el último momento.
Al campo santo llegaron maestros del Instituto Enrique Flores, de Managua, quienes les entregaron de manera póstuma un Diploma de Excelencia Académica a los familiares de la niña Julissa Morales.
De igual manera, sus compañeros de clases le escribieron cartas de despedida a la jovencita, y las colocaron sobre su ataúd blanco.
LA AMENAZÓ CON UN TUBO PARA ASAR CARNE
Don Orlando relató que presuntamente los celos enfermizos empujaron a Bayardo Morales a cometer el terrible crimen, pues no aceptaba que doña Julissa tenía otra relación amorosa.
“Él amenazó de muerte con un tubo para asar carne a mi hermana y ella lo denunció… a él lo echaron preso en enero de este año, pero solo un mes estuvo en la cárcel… ella aceptó una mediación porque no lo quería ver preso porque era el padre de su hija y por todo el tiempo que fueron pareja” contó don Orlando.
“A él le pusieron una orden de alejamiento, pero fue astuto, se acercó más a la niña y la invitaba a salir y le mandaba regalos a Julissa para que regresaran” contó el adolorido hermano.
Con el paso del tiempo logró convencer a doña Julissa de quedarse a dormir en la casa, con el compromiso de dormir en la sala, pero al parecer todo era parte del plan que ya tenía previsto ejecutar.
ORIGINARIA DE SIUNA
Tu Nueva Radio YA conoció que doña Julissa Montoya nació en Siuna, Caribe Norte, era la tercera de 8 hermanos, y a los 8 años se la llevaron a vivir a Tipitapa.
Tuvo una primera relación en la que tuvo 2 hijos que actualmente viven en los Estados Unidos.
Vendió su primera casa en Linda Vista y con el dinero obtenido compró la vivienda en Villa Feliz, donde fue asesinada junto a su hija.
Se dedicaba a vender perfumes y su cuerpo fue encontrado agarrado de una mano junto a su hija sobre una cama.
Tras acomodar los cadáveres, Bayardo Morales les colocó un ramo de flores y un corazón con la frase Te Amo, posteriormente el autor del doble crimen caminó a otra parte de la casa y se suicidó.