Camila Rojas, es la joven madre que murió al recibir 97 puñaladas en el sector de La Serena, en Chile. El sospechoso del crimen es un vecino de la víctima.
El hombre identificado como Francisco Javier Novoa Ibaceta, de 40 años. Tenía antecedentes penales y había sido condenado previamente por hurto. Además, tenía medidas cautelares vigentes por un caso de abuso sexual. Él debía ir a un juicio oral por el delito.
El lamentable hecho ocurrió cuando el sujeto, quien estaba bajo los efectos de las drogas y el alcohol, entró a la casa de la mujer.
Al parecer, él entró a la vivienda para atacar a la hija de Rojas, quien tiene 5 años. La pequeña fue herida en su espalda, así como otras partes del cuerpo, con un arma blanca.
Después de que la atacara, la mujer se interpuso entre su hija y el hombre para defenderla y el sujeto la apuñaló casi 100 veces, provocándole la muerte.
El fiscal Carlos Vidal señaló que Rojas fue apuñalada en el pecho, el cuello y cabeza.
Las autoridades acusaron a Novoa Ibaceta por los delitos de homicidio calificado consumado y homicidio frustrado. Un juez dictó prisión preventiva contra él, al considerarlo un peligro para la sociedad.
El hombre fue colocado en una celda aislada para evitar que fuera agredido por otros reos.